Vale, tengo claro que quiero empezar a documentar mi progreso porque le veo el beneficio, pero, ¿cómo lo hago?
Lógicamente hay muchas maneras de poder hacerlo, y más con la tecnología actual: móviles, ordenadores, etc; pero también puedes elegir el método “analógico” de toda la vida.
Cuaderno y boli es posiblemente el método más común y que más se ha utilizado durante años.
Es rápido y fácil.
Simplemente mételo en tu bolsa del gimnasio y no te tienes que preocupar de no tener batería, cobertura, tener las manos sudadas, que se te vaya a romper.
Ventajas: Rápido de escribir sobre todo si no te manejas con los teclados del móvil.
Barato (2€ y tienes para meses).
Fácil de usar.
Déjalo en la bolsa del gimnasio y despreocúpate.
Todo el mundo ya tiene un smartphone, ya sea iOS o Android.
Hay mil y una aplicaciones para el gimnasio, nutrición… que nos pueden servir para tomar nota de nuestros entrenamientos y dejarlos guardados para siempre.
Aunque hay aplicaciones específicas para el gimnasio, donde te permiten crear tus rutinas, subir tus entrenamientos; a mí personalmente me ha resultado más cómodo usar aplicaciones minimalistas, más en plan hojas de cálculo o notas.
Lo que más uso ahora mismo es Google Drive, que es el disco duro en la nube de Google, y en concreto para usar las hojas de calcula una sub-app que es Google Sheets.
Es muy cómodo de usar, ya que puedes planearte tu planificación online o en el pc y luego subirla, y siempre la vas a tener disponible con las modificaciones que hagas en cualquier sitio.
También es muy fácil usar el móvil como bloc de notas, y también se te sincronizan con tu cuenta de Google o iCloud, dependiendo del servicio que uses.