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¿Qué factores intervienen en la dominancia lateral?

Zoe Requena
Zoe Requena
2025-07-31 01:03:45
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La dominancia lateral manual es el nombre que recibe el uso de una mano con mayor destreza y eficacia que con la otra. Es la expresión de una adecuada organización neurológica. La dominancia lateral se refiere no sólo a la mano, sino también a las extremidades inferiores y a los órganos sensoriales. No es hasta los 5 años que se establece definitivamente el uso preferente de una mano. El establecimiento de la lateralidad es necesario para habilidades como son la escritura y el lenguaje.
Marco Varela
Marco Varela
2025-07-30 20:33:47
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La dominancia de una persona está determinada por el predominio de uno de los hemisferios. Los expertos indican que la dominancia se ve condicionada por nuestros genes, por lo que tendríamos más posibilidades de ser zurdos si existiesen antecedentes familiares. Pero, en realidad, no nacemos totalmente diestros o zurdos, sino que nos vamos convirtiendo en tales en nuestra primera infancia, influidos por esa tendencia genética y por el entorno en el que crecemos. Podemos tener indicadores de la dominancia desde que el niño empieza a voltearse, por el lado hacia el cual se voltea primero; o al agarrar objetos, por la mano con la cual lo toma primero. No obstante, antes de los tres años es normal que no haya una dominancia definida y que el niño experimente con ambos lados de su cuerpo. Hay cuatro partes del cuerpo que nos van indicando la dominancia del niño: mano, pie, ojo y oído. Cuando en estos cuatros miembros el niño tiene la misma dominancia podremos decir que se ha logrado un adecuado desarrollo de la lateralidad. La lateralidad cruzada sería entonces cuando el predominio de la mano, del ojo, del oído o del pie no se ubica en el mismo lado del cuerpo que los demás miembros. El objetivo de la dominancia lateral es que uno de los hemisferios sea el que dirija o controle los procesos mentales. Una lateralidad mal establecida es el caso del niño ambidiestro. Es como si un carro tuviera dos volantes y dos conductores, sería un caos. Los dos hemisferios compiten o cooperan, el objetivo es que lleguen a cooperar, ya sea que esto ocurra de manera natural o con un acompañamiento terapéutico.