La repetición es la acción de repetir o repetirse, es decir, volver a decir lo que ya se había dicho o hecho. La repetición como tal se usa en diferentes contextos como la música, el arte, la psicología, la literatura y la educación. En todos ellos se ha usado para el aprendizaje como método de consolidación del aprendizaje ya que se la repetición es un mecanismo que permite estructurar la forma y configurar el sentido de un discurso estableciendo así la cohesión y coherencia de este.
Se distinguen dos formas de repetición que ayudan a mantener la información en la memoria a corto plazo para, después, pasarla a la memoria a largo plazo. Estas son: repetición de mantenimiento y repetición elaborativa. Repetición de mantenimiento: se mantiene la información en la memoria a corto plazo. Pocas veces pasa la información a la memoria a largo plazo dado que, fundamentalmente, lo que se pretende con este tipo de repetición es retener la información durante espacio corto de tiempo. Como ejemplos de la vida cotidiana se pueden encontrar, el recordar una palabra como “Leche” hasta que se localice papel y bolígrafo para anotar en la lista de la compra. Repetición elaborativa: la información a recordar se basa en otra información previa que ya se tiene aprendida. Como ejemplo se puede encontrar el leer en voz alta unos apuntes que se han dado en clase ese día.