A partir del año, comienza una apasionante aventura, no exenta de obstáculos, de descubrimientos, habilidades y destrezas sociales que irán ayudándole a crecer y a madurar.
Desde la primera vez que da sus primeros pasos hasta su primer amigo, la primera decepción... tendrán que recorrer un largo camino.
Con un año, dan sus primeros pasos.
Ante ellos se abre un mundo nuevo que explorar.
Con dos años, su habilidad motriz mejora, y eso les permite interactuar mucho más con su entorno.
A los tres años, entienden que pueden hacer muchas cosas solos...
Cada año es un reto para ellos, es como un libro abierto en donde irán apuntando sus logros.
En la etapa de 1 año, los niños por lo general aprenden aspectos relacionados con el conocimiento de sí mismo y de los demás, lo más representativo es que distinguen su propio nombre.
También aprenden hábitos de relación con los adultos y con otros niños, así como hábitos de higiene y autonomía, por ejemplo, lavarse las manos, y el control de los esfínteres.
También son capaces de identificar y gestionar sentimientos, de sorpresa y alegría, de tristeza, el cariño y las atenciones emocionales.
Hablando del área cognitiva, el niño comprende, relaciona y se adapta a nuevas situaciones mediante el uso del pensamiento y la interacción directa con los objetos.
También en su lenguaje comprenden e interpretan algunos elementos de la lengua escrita a través de los cuentos, de ahí que sea muy importante que los padres aparten un tiempo de calidad para comenzar con el hábito de la lectura.
En tanto los niños de 2 años aprenden a reconocer su propia imagen y la de los otros.
Pueden identificar las partes de la cara, como los ojos, nariz, y boca, y del cuerpo, como la cabeza, brazos y manos.
Comienzan también a identificarse sexualmente, es decir, saben distinguir si son niños o niñas.
Finalmente empiezan la etapa en la que a nivel motor sus movimientos son aún muy toscos, y apenas tienen adquirida la pinza manual.
Justo al cumplir los 3 años, tu hijo podrá ser capaz de mejorar en las habilidades de razonamiento lógico y juegan más tiempo, además quieren saber más sobre las cosas que le rodean.
En el área motriz son capaces de hacer puzles sencillos, de clasificar y ordenar objetos, saben lo que es igual de lo diferente, cuentan hasta 5 y reconocen los números.
También sus habilidades motoras y la motricidad gruesa han mejorado mucho.
Pueden correr, trepar, montar en triciclo, jugar en los columpios o a la pelota.
Además, la motricidad fina ha mejorado bastante y pueden utilizar los dedos con mayor eficacia.
Ya pueden pintar cogiendo lápices con los dedos y no con los puños, armar bolas y serpientes con plastilina y desvestirse sin ayuda.
Al llegar a los 5 años los niños pueden hablar con claridad con oraciones complejas y compuestas, porque han adquirido un buen vocabulario.
También son más pacientes y saben esperar su turno.
A la vez avanzan no sólo en el lenguaje oral, sino también en la escritura.
Las letras representan sonidos en las palabras habladas y gracias a eso pronunciarán con precisión y escribirán en función de los sonidos.
De igual manera tienen mucha imaginación y pueden contar historias inventadas, serán capaces de entender las formas y los números por lo que tienen mayor capacidad de conteo.
Seguramente ya aprendieron a hacer sumas y restas simples, operaciones básicas de identificar el número mayor del menor o a empezar a decir y a entender la hora, así como el concepto social de tiempo.