En este caso, se trata de una prueba que se divide en varias partes y valora las capacidades necesarias para poder circular con seguridad, tanto física como psíquicamente. Podemos agruparlas en 3 categorías: 1. Cuestionario de salud 2. Pruebas psicomotrices 3. Revisión oftalmológica.
Seguramente lo primero que realicen en el examen psicotécnico es una ristra de preguntas acerca de tu salud. Esto es importante ya que hay algunas enfermedades o condiciones médicas que impiden la obtención del carnet o lo condicionan.
Las enfermedades que pueden impedir que tengamos la posibilidad de tener un permiso de circulación son: Arritmias, Personas que portan marcapasos, Portadores de desfibriladores automáticos, Personas con prótesis para válvulas cardiacas, Aneurisma de vasos sanguíneos importantes o disección, Diabetes mellitus, Hipotiroidismo, Parotiroides, Demencias, delirios o trastornos de ansiedad, Trastornos de la personalidad o catatónicos, Trastorno del sueño, obsesivo compulsivo, de desarrollo intelectual o THD, Ansiedad o depresión, Dependencia y abuso de drogas, Epilepsia, Pérdida de conciencia, Accidente isquémico transitorio, Nefropatía con diálisis, Trasplante renal, Apnea del sueño o disnea, Dolencia de tipo oncológico y oncohematológico.
En este punto, el médico busca evaluar tus capacidades psicomotrices para determinar tu capacidad de coordinar movimientos.
Esta prueba del examen psicotécnico se puede asemejar con la experiencia de revisarnos la vista en el oftalmólogo. El objetivo, en este caso, es el de valorar si tienes capacidad de visión suficiente para circular con seguridad.