Precauciones para manipular las baterías del vehículo.
Se deben llevar puestas gafas de seguridad, tal y como recoge la norma europea CE EN166, que también estipula que el lugar de trabajo debe estar bien ventilado.
Hay que tener en cuenta que el ácido o electrolito, puede provocar quemaduras en contacto con la piel, por lo que además de los equipos de protección, debe tenerse una especial precaución al manejar esta sustancia.
No obstante, en caso de accidente o incorrecta manipulación, si el electrolito cayera sobre el vehículo o en la zona de trabajo, se puede neutralizar su acción con bicarbonato sódico para después lavar la zona contaminada con agua.
A la hora de su manipulación, no deben abrirse con tapones de ventilación no extraíbles y en el caso de los extraíbles empleados, deben mantenerse apretados y a nivel, con la única excepción de los instantes en que se estén realizando trabajos de servicio en el electrolito.
Los expertos aconsejan que las baterías no se inclinen en ninguna operación ni tampoco emplear herramientas o conductores metálicos, para evitar cortocircuitos o chispas.
Por supuesto, el profesional debe haber leído las instrucciones del cargador utilizado en el caso de cargar una batería y hacerlo en zonas ventiladas, así como con los equipos de protección ya mencionados.
Otra precaución a adoptar es mantener los tapones de ventilación apretados y a nivel, así como apagar el cargador y el temporizador antes de conectar los cables a la batería para evitar que salten chispas.
Si la batería está dañada o congelada, hay que sustituirla, nunca intentar cargarla.
Pero en los casos en los que sea posible esta operación, hay que conectar los cables del cargador a la batería.