Los ejercicios que pueden ayudar a mejorar la coordinación motora en personas con trastornos de la coordinación están diseñados para fortalecer los músculos, mejorar el equilibrio y la percepción espacial y fomentar el movimiento coordinado.
Algunos ejercicios son el uso de pelotas terapéuticas, actividades de seguimiento ocular, juegos de equilibrio y ejercicios de coordinación de extremidades.
Hay una gran variedad de ejercicios que pueden ayudar a desarrollar las habilidades motoras.
Entre ellos pueden figurar actividades de manipulación de objetos, como rompecabezas, juegos de construcción, juegos de mesa y actividades artísticas como pintar o dibujar.
También pueden ser beneficiosos los ejercicios de coordinación óculo-manual, como lanzar y atrapar una pelota.
El entrenamiento visual Neurocircuit utiliza técnicas de integración motora y sensorial para reforzar las conexiones neurológicas entre el cerebro y el cuerpo.
Su objetivo es mejorar el tiempo de reacción, la memoria, la velocidad de procesamiento de la información, la percepción de la profundidad, la sensibilidad al contraste y la coordinación mano-ojo.
Nuestros fisioterapeutas utilizan técnicas de entrenamiento sensoriomotor, así como tecnologías punteras de entrenamiento de la visión, como Dynavision D2TM.
A medida que se desarrollan las habilidades del cliente, los entrenadores añaden estímulos para aumentar el nivel de tensión y suponer un reto para el cliente.
El entrenamiento reduce el tiempo de reacción del cliente ante distintos estímulos, mejorando así sus capacidades de seguimiento, sus procesos cognitivos y su percepción periférica.
El entrenamiento visual Neurocircuit ofrece muchas ventajas a nuestros clientes.
Al mejorar la coordinación mano-ojo, la percepción de la profundidad y la sensibilidad al contraste, nuestros clientes desarrollan las habilidades visuales que necesitan para destacar en diversas actividades, desde el deporte hasta la vida cotidiana y el trabajo.