Los polígonos se pueden clasificar según sus lados y ángulos en: Regulares.
Los polígonos regulares son aquellos que tienen todos sus lados y ángulos iguales.
Los polígonos irregulares son los que no cumplen esas dos condiciones.
La suma de todos los ángulos exteriores de cualquier polígono siempre es 360º .
Los ángulos exteriores de un polígono regular miden exactamente lo mismo que sus ángulos centrales, y se calculan de la misma forma: dividiendo 360 entre su número de lados.
Los polígonos irregulares son los que no cumplen esas dos condiciones.
Se llama polígono irregular a aquel que no es regular.
Un polígono es irregular si se cumple al menos una de las siguientes condiciones: no tiene todos los lados de igual longitud, no todos sus ángulos interiores son iguales.
Podemos distinguir dos casos: polígonos irregulares con todos los lados de igual longitud, pero no todos los ángulos interiores de igual tamaño, por ejemplo el rombo, polígonos irregulares que no tienen todos los lados de igual longitud, pero sí tienen todos los ángulos interiores de igual tamaño, por ejemplo el rectángulo.
La suma de los ángulos exteriores de cualquier polígono siempre da 360º , sea regular o no.
Portanto, para conocer la medida de cada ángulo exterior de un polígono regular, solo tenemos que dividir 360º entre el número de lados del polígono, todos medirán lo mismo.
La medida de los ángulos exteriores de cualquier polígono regular es siempre igual al valor de los ángulos centrales.