Seguridad en uso de visores

A partir del año 2021, con la finalidad de hacer frente a los daños ocasionados por la sobreabundancia de suidos, algunas Comunidades Autónomas han permitido la caza nocturna haciendo uso de visores térmicos y nocturnos para armas de fuego, al amparo de las excepciones que se contemplan en el artículo 61.1 de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. La distribución y comercialización de los visores nocturnos y térmicos para armas de fuego se realizará exclusivamente en los establecimientos de venta recogidos en el Reglamento de Armas, aprobado por el Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, y modificado por el Real Decreto 976/2011, de 8 de julio, es decir, en las armerías en conformidad con el artículo 56 del Reglamento de Armas. Sólo se permite la venta de los visores nocturnos y térmicos para armas de fuego a las personas que acrediten poseer licencia de armas “D” para armas de caza mayor. Se permite la compra desde cualquier Comunidad Autónoma, independientemente la legalidad de la misma, siempre y cuando se utilice dentro de las comunidades que si permitan su uso. Como todos sabemos, en estos últimos años ha habido un gran incremento del uso de los dispositivos térmicos y nocturnos dentro de la caza, lo que ha provocado que grandes marcas entren en este sector de lleno. También debido a este importante número de nuevos dispositivos, la ley ha incrementado sus restricciones para el uso del gran público. Una de las preguntas más mencionadas desde la aparición de los dispositivos térmicos o nocturnos es, ¿Puedo cazar con visor térmico o nocturno?. Dentro de las Comunidades Autónomas que permiten el uso de visores térmicos y nocturnos para caza, depende finalmente del coto en el que se realice esta actividad, ya que no en todos está permitido su uso, por lo que lo más sencillo será ponerse en contacto con el dueño del coto de caza para ver la disponibilidad de uso de estos visores o acoplables.

Visores de protección que ofrecen una protección más amplia al rosto respecto a las gafas. Se trata de una excelente solución para proteger los ojos y las vías respiratorias contra el polvo y las salpicaduras. También se utilizan en ambiente sanitario como producto antisalpicaduras.

La distribución y comercialización de los visores nocturnos y térmicos para armas de fuego se realizará exclusivamente en los establecimientos de venta recogidos en el Reglamento de Armas, aprobado por el Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, y modificado por el Real Decreto 976/2011, de 8 de julio, es decir, en las armerías en conformidad con el artículo 56 del Reglamento de Armas. Sólo se permite la venta de los visores nocturnos y térmicos para armas de fuego a las personas que acrediten poseer licencia de armas “D” para armas de caza mayor. Se permite la compra desde cualquier Comunidad Autónoma, independientemente la legalidad de la misma, siempre y cuando se utilice dentro de las comunidades que si permitan su uso. Existen cuatro principales tipos de dispositivos térmicos o nocturnos para caza que nos permiten diferentes usos. Estos se clasifican en monoculares, prismáticos, acoplables y visores. Siendo los monoculares y prismáticos los más extendidos en el uso cinegético o incluso en observación, gracias a su sencillo funcionamiento y que no es necesario la presentación de licencias que homologuen que lo vas a utilizar en una práctica de caza. Para la compra de monoculares y prismáticos, ya sean térmicos o nocturnos, no es necesario presentar ningún tipo de licencia, ya que son de venta libre.