:

¿Qué pasa cuando se aprieta el gatillo?

Alonso Espinal
Alonso Espinal
2025-07-08 10:52:12
Count answers : 3
0
De gran relevancia en el tiro con escopeta, se convierte en algo vital en disparos efectuados con rifle, donde la precisión puede verse muy afectada por una manera incorrecta a la hora de apretar el gatillo. En escopetas y rifles, la fuerza necesaria para activar el gatillo y efectuar el disparo se aproxima al peso de la propia arma. Desde el momento exacto en el que deslizamos el mecanismo de disparo, se accionan todos los resortes para, a una velocidad de milisegundos, activar la aguja percutora. Una tarea tan sencilla puede repercutir en gran medida en el resultado del disparo, afectando a la precisión. En demasiadas ocasiones convertimos el hecho de apretar el gatillo en un acto físico, muscular y voluntario que, en su conjunto, conlleva que se modifique el punto de impacto, muchas veces dejando los disparos por debajo de la zona a la que apuntábamos. La dirección de la fuerza ejercida debe dirigirse directamente hacia atrás, cualquier pequeña desviación provocará una variación de la posición del arma y, consecuentemente, del disparo. Debe ser la tercera falange, llamada falange distal, la que haga contacto con el disparador del arma, concretamente la parte central de nuestra huella digital. Si lo rodeamos con el dedo, es muy probable que sea la segunda falange la que lo accione, forzando un movimiento que entrañará un desplazamiento lateral, natural en esta articulación del dedo. Esto puede provocar una desviación del disparo, algo que se puede eliminar con un buen apoyo del rifle pero, aun así, debemos tenerlo en cuenta. Debemos familiarizarnos con la presión que requiere nuestra arma, y una de las mejores maneras de hacerlo es practicar, repetir la acción de disparo de la manera idónea hasta que consigamos efectuarla de forma óptima. Se suele recomendar contener la respiración y actuar en apnea, a continuación, comenzaremos a ejercer una presión progresiva y de manera muy lenta sobre el gatillo hasta que el disparo nos sorprenda en el recorrido del gatillo hasta llegar al break point o punto de disparo. Cuanto mayor sea esa sorpresa, más cerca estaremos de conseguir una regularidad en la precisión al alcanzar nuestro objetivo.
Alonso Ruvalcaba
Alonso Ruvalcaba
2025-07-08 09:41:38
Count answers : 3
0
Una vez que decido apuntar, he decidido disparar. No hago nada de esto una vez que decido apuntar mi arma porque he decidido que es necesario dispararle a ese objetivo/asaltante y mirar por la mira realmente introduce visión de túnel, al menos para mí. Una vez que el arma sube, en lo único que me concentro es en el centro de masa. La rendición o la huida son quizás milisegundos demasiado tarde.
María Navarrete
María Navarrete
2025-07-08 06:10:17
Count answers : 4
0
Llegados a este punto, apretamos el gatillo y se produce el disparo. Es importante apretar el gatillo de forma progresiva y utilizando todo el recorrido del mismo. No se trata de dar un “calambrazo” o un martillazo, sino todo lo contrario; no es un impulso, sino una presión constante y fluida. Haciéndolo así nos evitaremos movimientos innecesarios del arma. En este momento, cuando apretamos el gatillo, se produce una serie de movimientos mecánicos dentro del arma que ocurren en centésimas de segundo. En primer lugar, el gatillo suele liberar el martillo percutor o percutor a secas. Dicho percutor golpea el pistón o fulminante del cartucho, produciendo una ignición. Esta ignición genera la combustión de la pólvora. Y son realmente los gases de esta combustión los que, al expandirse rápidamente y multiplicar el espacio necesario para su liberación, permiten que el taco o el proyectil salgan impulsados a gran velocidad por el cañón. Aclaremos por tanto que el disparo no es una explosión, sino más bien es una combustión. Esta combustión se produce dentro del cartucho o de la vaina, que a su vez está alojada ya dentro del cañón del arma. En las armas semiautomáticas, el retroceso producido por la combustión y salida del proyectil hace que se muevan más mecanismos para expulsar la vaina o cartucho vacío y se recargue de nuevo el arma.