Las armas de aire comprimido son perfectas para tiradores, coleccionistas y aficionados a las armas.
Se trata de armas que usan la fuerza del aire comprimido, frente a las armas de fuego convencionales, que se basan en reacciones químicas que producen una gran cantidad de gases cuando se quema la pólvora.
En cuanto a los calibres usados, los más populares son los de 4,5 mm (.177 pulgadas) y de 5,5 mm (.22 pulgadas).
El primero es el oficial para competición y normalmente son de polomo o de aleaciones de este elemento.
Son muy precisas y fáciles de manejar.
En cuanto a su precio, varía en función del modelo, la calidad, el tipo y el fabricante del arma.
Algunos de los principales fabricantes de carabinas y pistolas de aire comprimido son Gamo, Storm, BSA, Croman o Walther.
La venta de las armas de aire comprimido ha crecido considerablemente en los últimos años.
Gracias a sus numerosas ventajas, muchos tiradores las prefieren incluso por encima de las armas de fuego.
Son muy precisas y fáciles de manejar.
Algunas están diseñadas para el disparo general, mientras que otras están diseñadas concretamente para la competición de tiro al blanco o la caza.