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Seguridad en entrenamientos en baja humedad

José Suárez
José Suárez
2025-10-10 04:01:58
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Usa ropa adecuada para entrenamientos con bajas temperaturas. Cuando hace frío, debes mantener el cuerpo bien cubierto. Usa ropa deportiva de tejido sintético y transpirable para evitar acumular humedad y debe ser resistente al viento e impermeable. Que se pueda abrir parcialmente, que las mangas se puedan subir y bajar sin molestias, que disponga de cremalleras debajo de las axilas para evacuar calor en caso necesario, que tenga bolsillos para poder guardar unos guantes, son los más comunes. Protege la cabeza, el rostro y las manos. Las orejas, nariz y los dedos de las manos son zonas muy sensibles al frío. Usa bufandas, gorros y guantes para protegerlas. Recuerda, el viento intensifica los efectos del frío. Ponte protector labial o alguna crema hidratante deportiva para proteger la piel de la cara y nariz. Aplíquese un hidratante deportivo resistente a la transpiración y bálsamo labial para tener protección extra.
Pablo Villar
Pablo Villar
2025-10-10 03:23:02
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Ante la previsión meteorológica de una ola de frío polar durante los próximos días, es indispensable tener presente una serie de recomendaciones para evitar peligros para la salud de todas aquellas personas que deseen practicar deporte al aire libre. Unos consejos elaborados por el Centro de Medicina del Deporte del Consejo Superior de Deportes que sirven para mantener una vida activa y saludable durante los meses de invierno, siempre velando por la seguridad de los y las deportistas. Antes de salir de casa: Elige ropa adecuada. Utiliza varias capas de ropa que te permitan ponerlas o quitarlas en función de tus necesidades respecto a la temperatura. Consulta la previsión meteorológica. Si hace demasiado viento, frío o humedad, considera hacer ejercicio dentro de casa. Realiza un adecuado calentamiento mediante una actividad progresiva que te permita estar preparado o preparada para tu entrenamiento. Recuerda hidratarte bien antes y durante la actividad, aunque no tengas sensación de sed. Mientras practicas ejercicio: Ten cuidado con la nieve y las aceras heladas para no resbalar y caer. Utiliza calzado resistente y adherente con el que puedas pisar bien y evitar resbalones. Reconoce los signos de la hipotermia: escalogríos, somnolencia, pulso bajo, respiración lenta y superficial, confusión, pérdida de coordinación, etc.). Un descenso importante de la temperatura corporal puede provocar graves problemas de salud. Asesórate siempre por profesionales cualificados y, en caso de patologías previas, consulta antes a tu médico.

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Isabel Bustos
Isabel Bustos
2025-10-10 02:51:59
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La humedad relativa del aire impide que las gotas de sudor se evaporen, porque digamos que el aire ya está “lleno de agua” y no le cabe más cantidad, por lo tanto, se dificulta exponencialmente la posibilidad de perder temperatura corporal. Cuando el organismo se encuentra en tal situación, lo que hace es reservar el flujo sanguíneo a los órganos esenciales y, como consecuencia, los músculos que necesitas para correr no recibirán el oxígeno que necesitan, así que te cansarás rápidamente. Esto llevará a un aumento de la frecuencia cardiaca, que puede aumentar de 10 a 20 latidos por minuto, lo que hará su percepción del esfuerzo sea mucho mayor. Al enfrentarnos a una alta humedad, la sensación de fatiga prematura aumenta de forma exponencial, por lo que corriendo a nuestro ritmo normal nos sentiremos más fatigados. La humedad causa un aumento del dolor en algunas personas con enfermedades reumáticas, también afecta a personas que alguna vez sufrieron una fractura de huesos o accidentes musculares. Con el tiempo, el cuerpo se vuelve menos adaptable a la humedad: los cambios relacionados con la edad de las glándulas sudoríparas pueden disminuir la producción de sudor y reducir la capacidad del cuerpo para enfriarse de manera efectiva. El lugar donde se vive también juega un papel: se tarda generalmente de 10 a 14 días en aclimatarse a las condiciones de calor y humedad. Las personas que provienen de regiones húmedas tendrán mayor preponderancia a adaptarse. Si la humedad del aire es superior al 60%, ya empezaremos a sentir sus efectos en el cuerpo. Cuando la humedad es superior al 85% se recomienda evitar un entrenamiento de calidad. Siempre la actividad deberá realizarse hidratándose con frecuencia con agua y bebidas isotónicas.
José Bautista
José Bautista
2025-10-10 02:33:07
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Las recomendaciones de este Decálogo parten de una premisa principal: evitar hacer ejercicio en las horas centrales del día, entre las 12.00 horas y las 16.00 horas. Así, el momento del día más adecuado para realizar cualquier tipo de actividad física son las primeras horas de la mañana o bien las últimas horas de la tarde, ya que en estos momentos la incidencia de los rayos de sol y de la contaminación es menor. Además, en caso de caminar, correr o ir en bicicleta es aconsejable buscar caminos o senderos sombreados. La correcta preparación del cuerpo antes de una actividad física también es imprescindible. El calentamiento de los principales grupos musculares así como el tronco, brazos o cuello es básico antes de realizar el ejercicio así como terminarlo caminando o trotando a baja intensidad durante un período estimado de entre cinco y diez minutos. La alimentación también es muy importante de cara a afrontar cualquier ejercicio físico. Así, en verano hay que beber mayor cantidad de agua, si es posible, ligeramente fría, para asimilarla con mayor rapidez. No sólo hay que beber durante el ejercicio sino antes y después de realizarlo, pues así se encara la actividad convenientemente hidratado. Después de la actividad, es recomendable reponer fuerzas con una bebida que contenga glucosa, fructosa, carbohidratos y sales minerales. En general, lo aconsejable es beber un litro y medio de líquido por cada kilogramo de peso perdido durante el ejercicio. Controlar las comidas es otro de los puntos a destacar de este decálogo. Deben ser ligeras antes de realizar actividad física y deben incluir cereales, fruta y leche. Se debe comer entre 90 y 120 minutos antes de iniciar la actividad. Vestir una ropa adecuada de colores claros así como unas zapatillas adecuadas ayudará también a mejorar el rendimiento del ejercicio. Una excesiva actividad física o una mala preparación del cuerpo pueden acarrear problemas físicos. Así, si aparecen mareos o náuseas es aconsejable dejar de hacer ejercicio, porque son señales inequívocas de que el cuerpo sufre de agotamiento por el calor. En estos casos es recomendable descansar en una zona sombreada y beber hasta lograr una total recuperación. También es importante conocer los síntomas de la deshidratación, que son sensación de sed, dolores de cabeza, irritabilidad, debilidad, mareos, calambres musculares, vómitos, así como una reducción del rendimiento. Ante estos síntomas es imprescindible detener la actividad e hidratarse. Si a pesar de todo, el cuerpo no se recupera, hay que acudir a la atención médica ya que puede tratarse de una insolación o golpe de calor, cuyas consecuencias son más graves que un simple agotamiento por el esfuerzo realizado.

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Candela Lebrón
Candela Lebrón
2025-10-10 01:59:33
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Hacer ejercicio diariamente es importante para llevar un estilo de vida saludable, aunque en ocasiones la naturaleza interrumpe las rutinas programadas, en particular un clima lluvioso, pero existen medidas preventivas que hacen que el deporte bajo la lluvia se realice sin contratiempos. Complementándolo con el consumo de alimentos sanos y en la limitación de grasas dañinas, el ejercicio no solo contribuye a llevar una vida saludable a nivel físico, sino también emocional y mental, esto por elevar los niveles de autoestima, de actitud positiva hacia la vida y hacer que la persona se sienta con más energía para realizar sus actividades cotidianas. Jaime Carrillo Chargoy, Jefe del departamento de asistencia médica de la Comisión Nacional de Cultura física y Deporte (CONADE), da un panorama más claro de los pros y contras de entrenar en climas lluviosos. No se ha reportado ni determinado que exista una diferencia y que con este tipo de clima mejore tu entrenamiento, al contrario en climas calurosos es donde se ha demostrado que hay una mayor deshidratación. En cuestión de actividad física los pros son los mismos, no cambia en nada la parte climática, que son mejoras en los parámetros metabólicos, optimación en la capacidad física y el estado de ánimo, debido a la producción de neurotransmisores que favorecen la parte emocional. Además previenen las enfermedades crónicas degenerativas como lo son la diabetes, la hipertensión, el sobre peso entre otras. El frio favorece que haya un enlentecimiento de las defensas mecánicas del aparato respiratorio, por eso se debe cuidar del no exponerse a cambios bruscos de temperatura y más si se está cerca de alguien que pueda contagiar o si se manifiestan síntomas. Si tenemos contacto con algún virus, una bacteria el cuerpo es más vulnerable a contraer enfermedades respiratorias, pero ni el frio ni la lluvia son los causantes de la enfermedad. Es importante tomar vitaminas, antioxidantes para favorecer y fortalecer el sistema inmunológico así como hidratarse constantemente en cualquier tipo de clima, ya que el ser humano cuenta con pérdidas insensibles además de la sudoración, también se pierde agua por la evaporación durante la respiración. Si bien en ocasiones se interrumpen las rutinas de ejercicio a consecuencia de la lluvia y el frio, estas recomendaciones permitirán continuar con la activación física, quitando así pretextos o mitos para que realizar deporte bajo la lluvia sea gratificante.
Vega Castaño
Vega Castaño
2025-10-10 01:38:47
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Mantener una rutina de entrenamiento constante puede ser difícil cuando el clima no acompaña. Ya sea en invierno, verano o en zonas húmedas, las condiciones ambientales pueden afectar tu rendimiento, tu motivación y, sobre todo, tu seguridad. Pero con algunos ajustes simples, es posible seguir entrenando de manera efectiva todo el año. En este artículo encontrarás consejos prácticos para adaptar tu entrenamiento a diferentes condiciones climáticas, junto con recomendaciones de productos de Proiron Perú que pueden ayudarte a entrenar con más comodidad y protección. Las bajas temperaturas pueden provocar rigidez muscular, menor movilidad articular y aumento del riesgo de lesiones. También es más común que cueste entrar en calor y mantener la motivación. El calor extremo aumenta el riesgo de deshidratación, fatiga rápida y, en casos severos, golpes de calor. La humedad ambiental puede hacer que incluso los entrenamientos suaves se sientan más pesados. Además, el sudor no se evapora bien y la piel se mantiene húmeda, lo que puede causar incomodidad, resbalones y problemas respiratorios. Cuando el clima directamente impide salir de casa, es útil tener una rutina adaptable para entrenar bajo techo. Puedes armar una mini rutina de cardio y movilidad con ejercicios como: Jumping jacks Elevaciones de rodilla Sentadillas al aire Abdominales suaves Estiramientos de columna y piernas. El clima no tiene por qué ser una barrera para tu entrenamiento. Con algunos ajustes de rutina, buena planificación y los accesorios adecuados, puedes seguir moviéndote con seguridad durante todo el año. Adaptarte no significa bajar el nivel, sino entrenar de forma más inteligente.

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Elsa Valencia
Elsa Valencia
2025-10-10 01:13:33
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La práctica de la actividad física en días de temperatura y humedad, elevadas implica riesgos para la salud entre los cuales hay que considerar las posibilidades del golpe de calor y la deshidratación. Cuando se realiza la actividad física, aumenta la temperatura corporal, y esta temperatura debe ser eliminada al medio ambiente, siempre y cuando el ambiente tenga menos temperatura que el mismo organismo. Entonces, si consideramos que la temperatura corporal llega a los 37º o más durante el ejercicio, afuera no debería hacer esa temperatura para que el cuerpo pueda disipar ese calor. Por tanto, una temperatura mayor a los 35º aumentaría las posibilidades de riesgo de un golpe de calor. El mecanismo que tiene el organismo para eliminar el calor es a través de la evaporación, de la pérdida de líquido. Por eso es que se produce una sudoración importante cuando hay estas temperaturas, por lo cual, cuando hay humedad importante se transpira tanto y esto pérdida de líquido debe ser compensada con adecuada reposición. Hay que pensar que en un adulto promedio, la pérdida de líquido durante el ejercicio se acerca a los 800 a 1000 cc por cada hora de actividad física. Esto marca el volumen que se debería reponer para evitar la deshidratación. A la vez debemos tener en cuenta que la sudoración es la pérdida de líquidos y minerales, por eso la reposición también debe ser mediante agua y minerales para no quedar en desequilibrio de los electrolitos. La administración de líquido, se debe comenzar una hora antes o al menos media hora antes de iniciar la actividad física. Se debe comenzar con la ingesta de agua. Luego, durante la actividad física se deben ingerir bebidas isotónicas entre las cuales podemos mencionar las bebidas comerciales conocidas o usar sales de rehidratación corporal, las cuales se disuelven en un litro de agua. Esto habría que tomar a razón de un litro por hora. Una vez finalizada la actividad física se debe proseguir con las bebidas isotónicas hasta observar una adecuada hidratación.