El tiro con arco es una disciplina deportiva que aporta grandes beneficios para la salud física, emocional y psicológica, un deporte que traspasa los límites de lo convencional para luchar contra el estrés o la falta de acción en la vida.
El arco favorece la coordinación óculo-motriz,
Los niños adquieren una capacidad para utilizar simultáneamente las manos o los pies, y la vista con objeto de realizar una tarea simultáneamente.
Potencia la capacidad de concentración y el autocontrol.
Un niño que es capaz de detectar las emociones que siente, puede afrontar cualquier situación de una forma más beneficiosa.
El autocontrol, sin duda, te lleva a una vida más exitosa y feliz.
Genera integración social de niños, jóvenes, adultos, ancianos y discapacitados en un mismo entorno.
El niño adquiere la habilidad de adoptar diferentes perspectivas, es decir, se trata de la capacidad para ponerse en el lugar de otro, la capacidad de ver el mundo con los ojos de personas diferentes a nosotros.
Control y liberación de situaciones de estrés diarias.
El deporte y las competiciones deportivas desarrollan valores y actitudes que moldean el espíritu y el carácter de las personas.
Crea personas con mentalidad positiva, cultivados en el esfuerzo personal y la superación, respetuosos, justos y disciplinados.
Diversión y desafío personal.
Además de lo que este deporte te hace disfrutar, es muy importante marcarse retos y desafíos personales, ya que esto nos ayuda en un futuro a saber disfrutar de nuestros propios logros, pero también de salir adelante de nuestros propios fracasos.
Si realmente estás interesado en que algún niñ@ de tu entorno, comiencen en el tiro con arco, este deporte siempre debe ser practicado bajo la supervisión y orientación de profesionales.
Por lo que si te interesa, lo ideal es que te acerques a centros deportivos que cuenten con instructores profesionales en esta disciplina.