El mal de altura se produce cuando no se obtiene suficiente oxígeno del aire a grandes altitudes.
La presión atmosférica reducida y los niveles más bajos de oxígeno pueden provocar una variedad de síntomas, desde dolores de cabeza leves hasta afecciones graves que pueden poner en peligro la vida.
Reconocer los síntomas a tiempo es fundamental para prevenir problemas de salud más graves.
Estos son los signos más comunes del mal de altura:
Síntomas leves
Dolor de cabeza: A menudo es el primer síntoma y puede ser de leve a grave.
Mareo: Sensación de mareo o inestabilidad.
Náuseas y vómitos: Malestar estomacal y ganas de vomitar.
Fatiga: Cansancio y debilidad inusuales.
Insomnio: Dificultad para dormir, a menudo debido a falta de aire.
Síntomas severos
Confusión: Dificultad para pensar con claridad o actuar adecuadamente.
Dificultad para respirar: Incluso en reposo, la respiración se vuelve difícil.
Opresión en el pecho: Dolor o malestar en el pecho.
Pérdida de coordinación: Dificultad para caminar o realizar tareas sencillas.
Si experimenta síntomas graves, es fundamental descender a una altitud menor y buscar ayuda médica de inmediato.