La Ejecución Rápida es una técnica de compresión del cronograma que reduce la duración del proyecto al realizar actividades que están en la ruta críticas en paralelo que originalmente se planificaron para realizarse en secuencia.
Al igual que en el Crashing (Intensificación), el objetivo del Fast Tracking (Ejecución Rápida) es acortar la duración de la ruta crítica.
Por lo tanto, la ejecución rápida solo funciona cuando las actividades se pueden superponer para acortar la duración de la ruta crítica.
En Crashing o Intensificación, el cronograma se comprime al aplicar recursos adicionales, trabajar horas extras, etc. a las actividades de ruta crítica, mientras que en la Ejecución Rápida, las actividades que generalmente se realizan en secuencia se realizan en paralelo, para comprimir el cronograma.