Caminar es un ejercicio en el cual efectivamente no se van a exacerbar o aumentar daños estructurales, ya sean articulaciones, discos, ligamentos o en las vértebras de la columna cervical. No obstante, desde el punto de vista funcional se necesita una gran cantidad de músculos relacionados a la columna cervical para mantener la postura, el peso de la cabeza, el braceo al caminar, entre otros relacionados a esta área del cuerpo. Es por esto que si estos músculos son débiles, están contracturados y/o dolorosos, se puede aumentar el dolor en esta zona al caminar. Debe conocer el origen y causa del mismo para evitar exacerbarlos al caminar. Pero lo que sí está claro es que la columna cervical como estructura ósea y articular no sufrirá mayores impactos durante la caminata. Por el contrario, como se mencionó anteriormente el caminar puede resultar como un excelente ejercicio para aliviar la espalda y ayudarla a recuperar una postura más sana.