El feedback es una actividad natural, inherente al proceso de aprendizaje y que forma parte de nuestro día a día, dentro y fuera del aula.
Consiste en ofrecer y recibir información sobre el desempeño de una actividad e indicaciones sobre cómo mejorarlo.
Hattie y Timperley destacan que es uno de los factores que más contribuyen a la consecución de los objetivos de aprendizaje por parte de los alumnos.
Se trata, pues, de una herramienta que facilita y potencia el aprendizaje.
Existen diferentes tipos de feedback en función del aspecto en el que nos centremos.
La selección de uno u otro en función del contexto, del momento y de las necesidades de aprendizaje, determinará en gran medida sus efectos, que pueden ser a veces fuentes de fracaso y frustración, pero también motivadores y disparadores de aprendizajes.
En el curso Evaluar para aprender nos centraremos en cómo ofrecer este feedback y recibirlo y qué hacer con él, en qué momento, con qué palabras, en qué modo y medios.