Si tenemos un valor de vapor de agua en el aire mayor de los recomendados -en nuestro país es más común el exceso de humedad que una necesidad-, es recomendable tomar medidas para solventarlo como las siguientes: Abre las ventanas si no tienes un sistema de ventilación, sobre todo en invierno cuando es común que estén cerradas durante mucho tiempo. La ventilación es fundamental para eliminar la humedad, por lo que si no tienes otra opción al menos hay que dejar que entre el aire de la calle.
No cubras las zonas afectadas por la humedad. Si los zócalos del suelo o las paredes muestran rastros de humedad, lo peor es taparlos o pintar encima de ellos. Deja que se aireen y respiren esas zonas de la casa.
Evita tender la ropa dentro de casa, aunque sea invierno o llueva. Trata de hacer la colada en los días soleados o secos para evitar tender en interiores.
El bicarbonato sódico o la sal pueden ayudar a mejorar una zona afectada por la humedad.
Si en casa siempre hay una gran humedad, puedes comprar un deshumidificador que eliminará el vapor de agua en el aire. Con eso, la sensación de comodidad será mayor.
La mejor solución es instalar un sistema de ventilación mecánico que renueve el aire. En combinación con el deshumidificador podemos mejorar las condiciones climatológicas de nuestra casa.
No podemos dejar de controlar la humedad en el hogar, ya que las consecuencias del vapor de agua en el aire son nefastas para todos nosotros. Desde abrir las ventanas hasta instalar un sistema de ventilación mecánico o hacerse con un deshumidificador, toda acción es importante para combatir la humedad.