Adquirir el modelo adecuado va a ayudar a evitar lesiones y a aumentar el rendimiento y la destreza en el deporte.
La unidad de medida del peso, como parámetro de estudio, es la onza.
Una onza equivale a 28,5 gramos.
La horquilla de pesos va desde las 4 a las 20 onzas.
Y cuanto mayor peso tenga el guante, más protección ofrece por su relleno, pero más difícil resulta tener un buen manejo.
Así, los pesos más elevados reducen la velocidad del movimiento.
Estos modelos son perfectos para el entrenamiento de fuerza, mientras que los más ligeros son los idóneos para ganar en velocidad.
Con todo esto, el tamaño de los guantes de boxeo es el siguiente:
Guantes para niños: de 4, 6 y 8 onzas.
Guantes de 12 ó 14 onzas: para personas que miden entre 1,60 y 1,70 metros.
Guantes de 14 ó 16 onzas: para personas que miden entre 1,70 y 1,80 metros.
Guantes de 16 onzas en adelante: para personas que miden más de 1,80 metros.
El peso del guante no es el único aspecto a considerar para seleccionar la talla de los guantes de boxeo.
El propio boxeador, con su peso, es determinante para hacerse con el equipamiento correcto.
Guantes de boxeo de 12 y 14 onzas son perfectos para deportistas que no superan los 80 kilogramos y hacen un uso normal de este elemento sin llegar a ser profesional.
Guantes de boxeo de 16 onzas aportan suficiente protección y seguridad, pero como son más pesados, solo resultan útiles en personas con pesos que superen los 80 kilogramos y lleguen hasta aproximadamente los 95 kilogramos.
Las personas que superan los 95 kilogramos suelen decantarse por guantes de 18 a 20 onzas.
La segunda opción es la ideal para entrenar a púgiles de la categoría de peso pesado.
El detalle final, que te ayudará en la elección del equipamiento más idóneo, es que si vas a entrenar mucho en el saco, un mayor tamaño del guante consigue que se desgaste menos y que resulte más duradero.