:

¿Por qué me afecta tanto equivocarme?

Ana Rosales
Ana Rosales
2025-08-10 16:18:10
Respuestas : 25
0
Equivocarse y darse cuenta del error se traduce en una curva de activación neuronal en el cerebro. Esta activación se produce, anatómicamente hablando, junto a las neuronas que detectan el dolor. Así pues, esta relación entre error y dolor tiene una razón de ser muy poderosa: cuando detectamos el error, activamos de forma automática la sensación de dolor. Sin embargo, sentir dolor ante el error tiene un aspecto adaptativo: si el error no «molestara», no haríamos nada para aprender y evitar un nuevo error. Este malestar se convierte en motor de aprendizaje, aunque los estudiantes con malos resultados académicos muestran una curva mal ajustada: la sensación de malestar es demasiado fuerte. En ese caso el cerebro se bloquea, si el dolor es demasiado fuerte podemos decidir, en lugar de procurar hacerlo mejor, no hacerlo nunca más. Lo que pasa es que cuando uno se siente constantemente expuesto al error y al dolor, como sucede con los niños que tienen dificultades de aprendizaje, puede generar un rechazo frontal hacia todo aquello que causa frustración. Por eso es importante enseñar a aceptar el error como parte del proceso de aprendizaje de la vida, y procurar ocasiones de éxito para ayudar a crear una curva de activación neuronal beneficiosa.
Rayan Matos
Rayan Matos
2025-07-29 09:22:08
Respuestas : 21
0
Si no nos equivocamos, no progresamos, no crecemos, no nos permitimos conocernos. Sin embargo, nos educan para pensar que fallar es horrible, que siempre implicará un castigo o que tendremos nefastas consecuencias. Nos sentimos mal porque fallar se convierte en una herida para nuestro orgullo, ego y autoestima. La culpa como tal es una emoción poco útil ya que nos paraliza. Nos da pánico cometer errores por si decepcionamos a los demás, por una necesidad irracional de aprobación social continua, pero si condicionamos nuestra vida y nuestras decisiones con agradar a los demás, para que nos quieran, nos valoren, nos admiren, no seremos reales ni coherentes con nosotros mismos, a largo plazo, simplemente no seremos felices. Tenemos dos opciones: verlo como un fracaso vital, y podremos sentir entonces culpa, humillación, ira, ansiedad, miedo, tristeza, frustración, etc. O considerarlo una oportunidad para aprender, vivirlo como algo natural, asumir esas emociones de forma pasajera, recibirlas con poca intensidad y considerarlas una oportunidad para perdonarnos, para darnos comprensión y respeto.

Leer también

¿Por qué me da miedo equivocarme?

Miedo a equivocarse, sostenido por la vergüenza, que aflora cuando existe de la posibilidad de falla Leer más

¿Cómo se llama el miedo a los errores?

La atiquifobia o miedo al fracaso, es una condición psicológica que se manifiesta como un temor inte Leer más

Pedro Terrazas
Pedro Terrazas
2025-07-29 06:35:07
Respuestas : 23
0
El miedo a equivocarse, a cometer errores, a no poder retroceder las agujas del reloj y empezar de nuevo, es uno de los temores más frecuentes en el ser humano, y tiene dos caras. Una cara buena y protectora que nos facilita la adaptación al medio, ayudándonos a anticipar y evitar posibles peligros. El miedo es una emoción primaria –con la que nacemos, y que experimentan todos los miembros sanos de una especie– que está al servicio de nuestra supervivencia, permitiéndonos elegir la mejor forma de afrontar diferentes circunstancias. Aparece cuando interpretamos la realidad como amenazante ante un potencial daño físico o psicológico. Tener miedo de cometer equivocaciones o errores es sano y normal, ya que un error puede traer consigo daños físicos y psicológicos. Sin embargo, para algunas personas el miedo a equivocarse, lejos de ayudarles a resolver problemas, se los crea, debido a su incapacidad de tomar las riendas de su propia vida. La clave está en la interpretación. Las personas con miedo a cometer errores tienden a presentar un estilo cognitivo centrado en las amenazas y las pérdidas. Esta interpretación del mundo les dificulta tomar decisiones o emprender acciones debido a que experimentan elevados niveles de ansiedad cuando tienen que hacerlo. Para evitar esta ansiedad, deciden no intentarlo, o rendirse si no consiguen resolver el problema fácilmente y con rapidez.