La posición del sniper, a diferencia del combatiente convencional, es que se prepara con antelación la posición para disponer de toda la ventaja balística, a la vez que cómoda. Un buen tirador, es capaz de hacer un buen disparo en posturas poco ortodoxas si es necesario. El tirador de la derecha reposa todo el cuerpo sobre el suelo, incluso los talones, esto hace que ningún movimiento del cuerpo se transmita al arma. Con la tensión muchos músculos de nuestro cuerpo pueden moverse y hacer que en el momento del disparo el arma se mueva. Una postura que nos permite un apuntado natural, Natural Point of Aim, que se define donde el arma apoya naturalmente cuando estamos detras de ella. El rifle se convierte en una extension de nuestro cuerpo. Alineamos el rifle con la columna, las piernas tienen que estar completamente apoyadas en el suelo, nuestra cintura también tiene que estar apoyada en el suelo, de forma relajada. Colocaremos los codos de forma que no queden tensionando en la parte de la espalda, la posición de la mira tiene que estar centrada en el blanco con nuestro cuerpo completamente relajado. Si al abrir los ojos nuestro punto de mira no se a movido de donde estábamos apuntando significa que nuestro rifle ya forma parte de nosotros, como si fuera una extensión mas de nuestro cuerpo.