Estamos acostumbrados a escuchar desde pequeños que lo importante es participar cuando practicamos algún deporte de competición.
Poca gente realmente dice estas 4 palabras sintiendo que lo que dicen es cierto, que lo más importante cuando se practica un deporte es el mero hecho de practicarlo, mucho más que llegar al podio o ganar la copa.
Practicar un deporte de competición trae consigo muchos beneficios añadidos a esa larga lista, y que muchas veces no son tan tenidos en cuenta.
Se puede aprender a trabajar en equipo si se tiene la suerte de practicar un deporte colectivo.
Si estamos de acuerdo en que practicar un deporte de competición trae consigo estos y muchos otros beneficios, entonces podemos estar de acuerdo en que verdaderamente lo más importante es participar.
Me parece muy importante que en los entrenamientos y en las competiciones se les muestre y se les recuerde a los deportistas lo que están obteniendo al hacer lo que hacen para que, llegado el momento, la derrota no sea tan amarga y puedan mirar atrás sintiéndose orgullosos de lo alcanzado.
No obstante, creo que hoy en día cada vez importa más el resultado, y un buen ejemplo son las competiciones deportivas de categorías inferiores.
Me parece importante hacer una reflexión de por qué hay personas que priman el resultado o la victoria por encima de la participación y estudiar lo que hay detrás de este planteamiento, porque los deportistas son los primeros afectados por todo esto.