La visión térmica es una tecnología impresionante que ha revolucionado el mundo de la caza en el último lustro.
Su funcionamiento es claro: detecta la radiación infrarroja o el calor emitido por todos los objetos, incluidos los animales, y lo convierte en una imagen visible para el ojo humano.
En el contexto de la caza, esto permite a los cazadores identificar corzos, jabalíes o ciervos incluso en la oscuridad total o en condiciones de luz tenue, donde la visión normal sería ineficaz.
Los dispositivos de visión térmica, como monoculares, prismáticos y visores, captan las diferencias de temperatura entre los objetos y su entorno.
Los animales, al ser generalmente más cálidos que su entorno, aparecen claramente en la pantalla del dispositivo, lo que facilita su localización y seguimiento.
Esta tecnología es particularmente útil en la caza, ya que permite a los gestores cinegéticos detectar animales ocultos en el monte y realizar labores de conteo y vigilancia dentro de sus fincas o acotados.
Un jabalí detectado a través de un aparato de visión térmica.
© JyS
Así funciona la visión térmica
Lo primero que debemos tener en cuenta es que todos los objetos emiten cierto nivel de energía térmica, y esta energía es más intensa en seres vivos debido a su calor corporal.
La visión térmica aprovecha esta diferencia de temperatura para crear imágenes.
Un ciervo controlado por un dispositivo de visión térmica.
© Zeiss
Una vez que conoces cómo funciona, lo segundo que debes tener en cuenta es que la adquisición de los dispositivos nocturnos o térmicos está permitida en toda España.
No obstante, su uso está legislado por cada una de las comunidades autónomas, dentro de sus competencias medioambientales.
Consulta estas para conocer si es legal en tu zona.
10 monoculares térmicos baratos para cazar en España
Varios modelos de monoculares térmicos con una gran relación calidad precio.
© JyS
Para aquellos cazadores que necesiten un monocular térmico pero cuenten con un presupuesto ajustado existen varias opciones a precios accesibles.
En Central de Caza, se pueden encontrar varios destacados modelos por menos de 1.000 euros y algunos otros que superan por poco ese límite, si bien ofrecen una calidad superior.
Si tenemos en cuenta que este tipo de dispositivos pueden alcanzar precios de más de 3.000 euros, estas opciones que ya te propusimos en Jara y Sedal cuentan con un precio más que ajustado y, debido a que pertenecen a marcas de reconocido prestigio, encontraremos en ellos la calidad suficiente para disfrutar de lo lindo en nuestra próxima salida de caza.