¿Cómo funciona un gatillo?

El interruptor regulador de potencia o «gatillo» contiene un Triac, cuya misión corresponde a controlar la potencia mediante el ángulo de fase al que le somete el disparador para decidir qué potencia se requiere en cada instante de tiempo. Mientras no se alimente al motor, es decir, no se toque el gatillo, el TRIAC no entrará en conducción y los terminales 1 y 4 se encuentran en interruptor abierto. Una vez se pulse el gatillo, los terminales 1 y 4 entran en conducción al cerrarse su interruptor, y el circuito interno del disparador contiene un modelo de resistencia variable en la que dependiendo de la posición del gatillo la corriente irá variando y se mantendrá por encima del umbral necesario para el disparo del TRIAC. Si apretamos suavemente el gatillo, el motor del taladro irá a una velocidad moderada y si progresivamente se sigue aumentando la presión en el gatillo, el motor aumentará considerablemente su velocidad. Sin pulsar gatillo o manteniéndolo en reposo mantiene abierto el circuito entre los principales pines 1 y 4, por lo tanto el motor del taladro no está en movimiento. Al pulsar el gatillo +/- hacemos que la pletina unida al pin 4 establezca contacto permitiendo así el paso de la corriente desde el pin 1 hasta el pin 4 donde el TRIAC permitirá el paso a través de él, un valor de corriente adecuado según el nivel de apriete del gatillo. Más apriete, mayor potencia y al contrario, cuanto menor apriete menor potencia, hasta llegar al punto de un mínimo apriete que hará que el nivel de disparo en el TRIAC no sea suficiente para su activación, haciendo que el motor se detenga por completo. Al pulsar al máximo el gatillo, haciendo que junto a la conexión de los pines 1 y 4, también se establezca una nueva conexión con el terminal 2 que hará que evite por completo la regulación de potencia con el TRIAC haciendo que toda la corriente pase directamente para el motor sin restricción alguna y a máxima potencia.