El precio medio nacional para instalar un cargador doméstico tipo Wallbox se sitúa actualmente entre 950 € y 1.600 €, IVA incluido. Este rango abarca desde instalaciones sencillas hasta otras más complejas debido a distancia al cuadro eléctrico o requerimientos especiales. En ciudades como Madrid o Barcelona, el precio suele oscilar entre 1.100 € y 1.700 €, siendo algo más elevado por la mano de obra y permisos municipales. En Valencia y Sevilla los precios son ligeramente inferiores: desde 950 € hasta unos 1.400 €, dependiendo siempre del acceso al garaje comunitario o privado. En Galicia, Asturias u otras regiones del norte peninsular, la horquilla se mueve entre los 980 € y los 1.500 €. Baleares y Canarias suelen presentar costes superiores debido al transporte e insularidad: aquí las instalaciones pueden llegar a costar hasta 1.900 € en viviendas aisladas.
Los precios medios oscilan entre los 950 € y casi los 2.000 €, dependiendo fundamentalmente del tipo exacto de instalación requerida, ubicación geográfica y servicios complementarios elegidos.
La distancia desde el cuadro general hasta el lugar donde se instala el cargador, la necesidad de perforar muros gruesos o atravesar zonas comunes, la necesidad o no de aumentar la potencia contratada y el tipo exacto del cargador son factores que influyen en el presupuesto final.
La tramitación legal en comunidades vecinales también puede incrementar levemente el precio final si requiere informes técnicos adicionales.