¿Es mejor la visión nocturna o la térmica para cazar?

En cuanto a sus diferencias, la visión térmica ofrece unas distancias de detección muy superiores, llegando incluso a más de 3.000 m, facilitando la localización del sujeto, además no emite ningún tipo de luz visible, mientras que los iluminadores infrarrojos de los dispositivos de visión nocturna, sí emiten luz que puede ser visible, siendo esto perjudicial en muchos casos. Por último, la visión nocturna nos permite identificar las características del sujeto de forma más detallada que la visión térmica. No obstante, cabe destacar que los dispositivos de visión térmica cada vez cuentan con mayores rangos de detección de temperaturas, por lo que el sujeto puede apreciarse más claramente. Como se puede apreciar, ambas opciones tienen sus beneficios, por lo que nuestra recomendación es equipar un dispositivo de visión térmica para localizar al sujeto, y un dispositivo de visión nocturna para valorar sus características. No obstante, la elección final dependerá del tipo de actividad que se practique.

La elección entre un visor nocturno o un térmico dependerá del tipo de caza y del entorno. Si la caza se realiza en terrenos despejados y con buena visibilidad, un visor nocturno puede ser suficiente. Para cazar en bosques densos o con mala climatología, el visor térmico es una mejor opción. Funcionan mejor con algo de luz residual, como la luz de la luna o las estrellas. Ofrecen una imagen más detallada y natural en comparación con los térmicos. Sin embargo, tienen limitaciones en condiciones de oscuridad total o con climatología adversa como niebla o lluvia intensa. Los visores térmicos detectan la radiación infrarroja emitida por los cuerpos, permitiendo visualizar presas independientemente de la luz disponible. Funcionan perfectamente en oscuridad total, niebla o lluvia. Muchos cazadores optan por combinar ambos dispositivos para maximizar sus posibilidades. La decisión entre un visor nocturno o térmico dependerá de las condiciones específicas de caza y de las necesidades del cazador.

La visión nocturna y la visión térmica son dos de las piezas de equipo más importantes para cualquier cazador. Ambas tecnologías le permiten ver en condiciones de poca luz y pueden darle ventaja en diversas situaciones. La visión nocturna es una tecnología que utiliza una lente especial para captar y amplificar la luz. La visión térmica es una tecnología que utiliza imágenes térmicas para captar y procesar el calor. La termografía se utiliza para detectar animales en la oscuridad o en condiciones de niebla o nubes. La termografía también puede utilizarse para detectar personas u objetos en la oscuridad. La visión nocturna y la visión térmica son dos de los equipos más importantes para cualquier cazador. Ambas tecnologías tienen sus ventajas e inconvenientes y pueden utilizarse en diversas situaciones. Nuestra recomendación es que se complementen ambas opciones, ya que cada una aporta características muy interesantes. Particularmente, utilizamos un visor térmico para localizar el animal y un visor nocturno para reconocer el tipo de animal, tamaño y características. Al final, la mejor opción dependerá del tipo de caza que practique y del entorno en el que cace. Ambas tecnologías pueden ser increíblemente útiles y ayudarte a ser un mejor cazador. Es importante investigar y elegir el equipo adecuado para sus necesidades.

La visión nocturna no te quema tanto la vista como la visión térmica, para las esperas nocturnas. En cambio con un visor térmico, localizas al jabalí en medio segundo y con unos prismáticos, que es lo que he probado, de visión nocturna, tienes que rastrear para localizar al jabalí. Por otro lado, los visores térmicos nos sirve también para localizar animales a plena luz del día.

No existe una respuesta válida, pues ambos son complementarios. Ambos ofrecen sus ventajas y sus inconvenientes, por lo que es fundamental conocer las diferencias entre ambos dispositivos. Los dispositivos de visión térmica permiten detectar el objetivo, mientras que los dispositivos de visión nocturna ayudan a identificar exactamente el tipo de presa que tenemos delante. Ten en cuenta que ambas capacidades son fundamentales en las jornadas de caza, por lo que el éxito dependerá de contar con el equipo correcto y no de tener uno u otro. La visión nocturna nos permite captar imágenes que no podamos percibir con la luz que emiten los faros con luz visible. Los visores de visión nocturna son perfectos para detectar y analizar al animal que tengamos delante, ofreciendo una mayor precisión a una distancia más amplia que los visores térmicos. Los dispositivos de visión térmica aprovechan el calor que desprende el cuerpo del animal para crear una imagen. Para labores de caza y vigilancia, lo ideal es contar con ambos dispositivos, ya que podremos controlar los movimientos de los animales y las personas y, al mismo tiempo, identificar a las presas, dos tareas fundamentales en el las jornadas cinegéticas. Eso sí, si cuentas con un presupuesto ajustado, te recomendamos que elijas un visor térmico más económico y un dispositivo de visión nocturna de alta calidad no inferior a la tercera categoría.

Los visores nocturnos pueden ser el complemento idóneo para los cazadores amantes de las esperas, pues ofrecen al cazador la posibilidad de observar al animal con cierta claridad incluso en noches sin luna ni estrellas. Estos visores permiten ver lo que sucede en momentos de total oscuridad, algo impensable para el ojo humano si no dispone de este tipo de aparatos. El uso de la visión nocturna en la caza es, claramente, una herramienta de gestión necesaria si se emplea adecuadamente. Ayuda a no tener ninguna duda a la hora de apretar el gatillo y no llevarse las manos a la cabeza una vez abatido el animal. No volveré a salir al campo de noche sin mi Thunder Pro TQ50C. El visor que se ha convertido en imprescindible en mí morral de caza es el Thunder Pro TQ50C, que como he mencionado anteriormente es de la marca HIKMICRO, caracterizada por emplear la tecnología más avanzada del mercado, destacando su calidad de imagen y la capacidad real de detección de animales a través de sus sensores de 12 y 17 micrómetros. El resultado: no apreté el gatillo, pues el gran macareno resultó ser jabalina. Si no hubiera llevado el monocular, mi gestión habría sido nefasta. Así lo considero.

El entorno de la caza Dependiendo del lugar donde vayas a cazar, tiene sentido uno nocturno o uno térmico. Los de imagen térmica no funcionarán correctamente cuando se está cazando con lluvia o frío extremo. Tampoco puedes utilizar la térmica a través de una ventana de cristal cuando te refugies. Tienes que estar en el exterior, lo que tampoco es posible debido a la lluvia. En estos entornos, tiene sentido uno nocturno. El nocturno es nuestro ganador cuando cazamos en condiciones de frío extremo o de lluvia. Cabe destacar que la térmica no se ve inhibida por la niebla o el camuflaje, sino solo por el frío extremo. Aunque puedes cazar sin estos dispositivos durante el día, los dispositivos nocturnos están diseñados específicamente para su uso nocturno. Lo mejor de los térmicos es que puedes utilizarlos de día o de noche. A diferencia de los otros no necesitan ninguna luz para funcionar. Muy pocos y avanzados dispositivos de visión nocturna pueden funcionar durante el día. Sin embargo, la mayoría se dañan fácilmente con la luz brillante del día. Cuando necesites una identificación positiva de tu objetivo a pesar de la claridad de la luz del día, se recomienda uno térmico. ¿Estás cazando en animales como el ciervo que tienen parámetros estrictos? Es muy recomendable identificar claramente la caza antes de efectuar cualquier disparo. Aunque un monocular térmico puede detectar fácilmente un animal vivo, no puede identificar al animal concreto en cuestión. Las imágenes térmicas suelen mostrarse en blanco, negro o en otras tonalidades dependiendo de la temperatura. En tales situaciones, es preferible utilizar un visor nocturno. Los visores térmicos son buenos para detectar la caza, pero pobres para identificarla. La única situación en la que es difícil identificar una pieza de caza con la visión nocturna es cuando está camuflada y no se mueve. Como puedes ver, no hay un ganador obvio. Cada uno de estos visores desempeña un papel vital en diferentes situaciones. Tienes que conocer tu entorno de caza, la época en la que cazas, las piezas que vas a cazar y tu presupuesto antes de decidir cuál es el mejor visor para tus necesidades.

La elección entre visión nocturna y visión térmica es una duda común entre los cazadores, especialmente aquellos que no han tenido la oportunidad de probar ambos tipos de equipos. Los equipos de visión nocturna permiten identificar y valorar perfectamente, pero su desempeño se ve afectado por las condiciones lumínicas adversas, como la niebla o la lluvia. Los dispositivos de visión térmica ofrecen una mayor distancia de observación sin verse afectados por las condiciones de luz, la niebla o la lluvia. Sin embargo, los equipos térmicos no permiten identificar con precisión lo que se ve en la pantalla. La identificación de cuernas a través de visión térmica es otro tema debatido. Las cuernas se pueden detectar en ciertas circunstancias, como cuando están en crecimiento, después de que el animal haya estado expuesto al sol, la cuerna puede retener una temperatura residual, o cuando hay un fondo que contraste las diferencias térmicas, como tierra o árboles con temperaturas frías.