Así, Gill define el arousal como la intensidad de la conducta, para Malmo es una activación general que oscila desde el profundo sueño hasta una elevada excitación, y para Loerhr el arousal es un estado ideal de rendimiento caracterizado por relajación, soltura, calma, sin ansiedad.
El nivel de activación y/o arousal es muy importante en el mundo deportivo y se relaciona con los niveles de atención, ansiedad, motivación.
El control de la activación es fundamental, ya que la mayoría de las modalidades deportivas y cada deportista requieren un nivel óptimo de activación para alcanzar el máximo rendimiento.
Cada deportista y cada modalidad deportiva tienen su nivel óptimo de activación, y los deportes que demandan un control muscular fino necesitan un nivel moderado o bajo de arousal, mientras que otros deportes pueden requerir niveles más elevados de arousal.
Lograr el nivel de activación apropiado a cada competición se relaciona con la consecución del alto rendimiento.