¿Qué cepillo utilizar para limpiar?

Un cepillo de alambre es una herramienta fabricada con alambres metálicos de alta resistencia al desgaste que se utiliza para limpiar. Los cepillos de alambre metálicos, también denominados cepillos de cardas metálicas, son muy habituales en todo tipo de trabajos de limpieza donde se necesite un cepillo duro para limpieza, como pueden ser trabajos de limpieza de calderas, quitar pintura y muchos otros. Los cepillos están disponibles en muchos diseños y materiales de fabricación, de modo que se pueden clasificar según su composición en: Cepillos de alambre de acero, acero inoxidable y latón. Los cepillos de alambre de acero son los más universales y más económicos, los cuales nos ofrecen una elevada fuerza de limpiado, una alta resistencia y una larga duración. Los cepillos de alambre de acero inoxidable están diseñados con cuerdas de INOX, ofreciendo la ventaja de no contaminar ni dejar residuos corrosivos en las piezas o superficies cepilladas que pueden ser de inoxidable, aluminio u otros materiales de alta aleación. Los cepillos de alambre de latón son cepillos diseñados para trabajos más específicos, ofreciendo un buen acabado en operaciones de limpieza ligera, ya que son más flexibles. Estos cepillos de latón resultan ideales para obtener un excelente resultado mediante el cepillado en superficies de aluminio, cobre y latón. Además, los cepillos de latón nos permiten trabajar con menor riesgo de chispas. Un cepillo de alambre manual se utiliza habitualmente en trabajos de limpieza más específicos, donde no debemos limpiar una superficie muy grande ni debemos estar cepillando un largo periodo de tiempo. Por lo que hace a los cepillos de alambre para taladro o amoladora, también denominados copas, son los elementos utilizados en trabajos de cepillado más duraderos o intensos, ya que el poder trabajar con la herramienta nos facilita mucho el trabajo. El uso de un cepillo de radial o de taladro ya dependerá mucho de las preferencias de cada usuario en cuanto a precisión y forma de trabajar; o bien de la herramienta que dispongamos a mano en ese momento. Todos los cepillos están disponibles en distintos grosores de alambre según el uso que le vayamos a dar y el acabado que deseemos, además de estar disponibles también en distintos formatos según las necesidades de cada usuario y si es para limpieza manual, cepillado con taladro o cepillado con amoladora. Eso es una regla general en la decisión pero cada usuario debe elegir en función de su experiencia y preferencia.

Los cepillos eléctricos de limpieza suelen tener cabezales reemplazables y son de distintos tipos. Los de esponja suelen usarse para artículos fáciles de limpiar. En el caso de los de naylon, para limpiar áreas grandes. Y, en el de la para conseguir un efecto de pulido tras haber aplicado alguno de los anteriores. Tiene tres cabezales de cepillo: uno de nylon se usa para limpiar áreas grandes, otro de esponja se usa para artículos fáciles y otro de lana se usa para limpieza adicional después del lavado o efecto pulido. Cuenta con 4 cabezales de cepillo intercambiables que limpian eficazmente las esquinas sucias y muertas. Cuenta con un mango extensible (de 37-130 cm.) que te permitirá llegar a los rincones más altos sin apenas esfuerzo. Cuenta con 2 velocidades giratorias y 6 cabezales reemplazables. El cepillo de limpieza incluye 8 cabezales de cepillo reemplazables para varios escenarios. Los cepillos planos son adecuados para limpiar suelos y paredes; los cepillos de esquina son adecuados para limpiar los bordes; los cepillos de esponja son adecuados para limpiar platos; los cepillos de tela son adecuados para limpiar ventanas. El limpiador eléctrico LEKISHE viene con 5 tipos diferentes de cabezales de cepillo que están hechos de cerdas de PC gruesas de primera calidad que no se desprenden fácilmente y evitan que se raye la casa.